La modalidad no es comparable, ya que en el primer incidente que se investiga no había personas en el domicilio, por lo que no se pudo hacer más que una denuncia por robo. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de que ambos casos estén relacionados y que los autores sean los mismos.
El ingreso con intenciones de robo a una vivienda en Altos de Ñandubay podría tener vínculos con el ocurrido en el barrio privado La Adelina, en Gualeguaychú. La modalidad no es comparable, ya que en el primer incidente que se investiga no había personas en el domicilio, por lo que no se pudo hacer más que una denuncia. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de que ambos casos estén relacionados y que los autores sean los mismos.
El sábado pasado, durante el fin de semana de carnaval, al menos tres delincuentes ingresaron a una vivienda en el barrio cerrado Altos de Ñandubay y, de manera muy meticulosa, revisaron cada rincón de la casa sin dejar rastros. “Me jugaría mil veces que son los mismos que entraron a mi casa”, comentó la mujer afectada, quien, tras enterarse del asalto ocurrido entre la medianoche del jueves y el viernes en el otro barrio cerrado frente a su loteo, decidió compartir su experiencia con El Argentino.
El incidente ocurrió alrededor de las 22:30. Se confirmó que los delincuentes ingresaron caminando desde la ruta que conduce a Ñandubaysal y accedieron por uno de los laterales del loteo. Sabían perfectamente que no había nadie en la vivienda, por lo que entraron por la parte trasera, abrieron la reja sin forzarla y comenzaron a revisar todo el lugar.
La mujer sorprendida relató que, a pesar de las lluvias del fin de semana, que cubrieron todo el predio de barro, los delincuentes no dejaron ningún rastro dentro de la casa. “Fueron extremadamente prolijos”, señaló. Revisaron cada cajón en busca de dinero, pero no se llevaron ningún objeto de valor. La dueña de la vivienda no tiene dudas de que los autores del robo son los mismos que asaltaron a la mujer y su hijo en Prados de La Adelina, ya que en ese robo tampoco se llevaron artículos valiosos, solo dinero. “En mi casa no se llevaron un montón de cosas que estaban a la vista; solo plata. Fueron impecables en su organización”, comentó.
En el caso de Prados, se sospecha que uno de los asaltantes, que llevaba un pasamontañas, podría haber sido una mujer, debido a la contextura física, según relataron las víctimas. En Altos de Ñandubay, la mujer afectada también relató que uno de los delincuentes era probablemente una mujer, ya que muchas de las prendas que revisaron en los cajones fueron cuidadosamente acomodadas. “¿Qué ladrón te acomoda las cosas? Eso es cosa de mujer”, reflexionó.